Las categorías de propiedad, posesión y trabajo en el mundo rural castellano asumen una dimensión práctica que sólo puede comprenderse desde el estudio de las condiciones que el medio natural impone a los agentes. Las percepciones que se reconocen en el ámbito que hemos investigado en los siglos bajomedievales remiten, por lo tanto, a las formas de estructuración de la dinámica de producción que importan la apropiación de los recursos; en particular, la disposición efectiva del principal medio de producción que es la tierra. Sobre esta cuestión en especial, señala E. P. Thompson que el campesino “no sentía furiosamente (suponemos) que poseía su tierra, que era suya. Lo que él heredaba era un lugar en la jerarquía de derechos de aprovechamiento”. Esa jerarquía de derechos, sobre los que la organización política tendrá una intervención activa para regularlos y garantizar los múltiples intereses que atraviesan el universo de aldeas y de pueblos, se halla sujeta a una lógica de subsistencia que recorre y determina las diversas actividades productivas que sostienen la reproducción de los tributarios; a la vez que posibilitan el mantenimiento de los distintos sectores de poder en el área castellana de realengo en los siglos recortados en esta colaboración.
Fil: Luchía, Corina. Universidad de Buenos Aires; Argentina.
Fil: Luchía, Corina. CONICET; Argentina.